El polémico juego indie, Biomutant, recibe una actualización next-gen que mejora bastantes aspectos del juego, ¿vale la pena?

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Si hay un juego que ha generado revuelo y discusiones durante el año pasado es Biomutant. La mayoría sabemos el por qué se ha creado esta mala imagen alrededor de un juego independiente desarrollado por tan solo 20 personas. Desde su apartado artístico como su diseño de niveles, las críticas destructivas han afectado la reputación en la comunidad hispana. Eso sí, esta review no busca reivindicar a un juego que peca de ambicioso, pero que vale la pena jugar para entender la joya que hay detrás.

Antes de entrar en materia, quiero confesar que yo también he tenido prejuicios y bastantes dudas respecto a la calidad del juego. Me daba miedo y pereza pensar en jugar un juego que no iba a disfrutar, tal y como me lo pintaron varios creadores de contenido y reviews por el mundo. Claro, tan bajas notas son por algo, pero quiero dejar en este análisis constancia de que, tal vez, el juego no es tan malo como lo pintan.

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Y la cosa llega gracias a la versión optimizada para consolas de nueva generación de Biomutant. Una versión que se enfoca en garantizar una versión nativa del juego para mejorar el rendimiento del mismo, cosa que le habían achacado hace ya un año.

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Apartado técnico

Hay que decirlo, el juego se ve muy bien. Nos plantamos en un mundo abierto que tiene mucha personalidad, es un espacio post apocalíptico donde las mutaciones de animales, generadas por radiación y contaminación, denotan ese aspecto demacrado en todo. La naturaleza hizo de las suyas y se está abriendo camino por donde puede, dejándonos una estampa muy interesante.

Ahora, con la actualización a consolas next-gen, y jugando en una Xbox Series X, debo decir que los colores son muy atrayentes, pero en interiores la magia se pierde y las carencias técnicas del estudio desbordan e incomodan. Lo ves cuando inicias el juego, y es que inician con una cinemática espectacular, pero luego en el gameplay el cambio es tan brusco que de verdad te inquieta.

Esto no es nuevo, pero genera un choque menor que al jugarlo en su versión original, pues lo que mejora la experiencia es que ahora tiene una versión nativa de nueva generación. Eso sí, las texturas, modelados y demás no han cambiado, por lo que tenemos un juego que se ve muy bien gracias a su apartado artístico, pero que choca cuando vamos al detalle y tratamos de ver más allá.

Otro punto importante es la estabilidad del juego, pues este se mantiene a 60 FPS estables en Series X, pero en Series S está capado a 30. Todo bien aquí, pues los combates lo ameritan, es necesario tener fluidez, que antes no había, para combatir y explora el mundo.

Jugabilidad

En este apartado no diré nada diferente a lo que mi compañero Adrián comentó ya hace un año en su análisis del juego, pero si quiero entrar en algunos detalles acerca del funcionamiento y escalamiento de tus habilidades en varias horas de juego.

Lo primero, es que este apartado mantiene vivo a Biomutant, para mí, si no fuera por su dinamismo y gran variedad útil de opciones de juego, sería un desastre. Es un RPG, por lo que podremos crear a nuestro personaje añadiéndole características únicas de aspecto, las cuales también definen rasgos jugables; y no solo eso, pues tu clase también definirá cómo será el estilo de combate y armas que llevarás.

Sabiendo todo esto, sabrás definir tu forma de juego, que de por sí es un hack and slash, para poder hacer frente a los enemigos. Esto de verdad es muy refrescante, la mayoría de juegos no diferencian demasiado en estos aspectos, por lo que la monotonía o complejidad de personalización se resumen a que usarás al que tiene espada y resiste muchos golpes.

Eso sí, transcurridas varias horas de juego, te darás cuenta de que puedes ir incrementando tu nivel, dando la maniobrabilidad de los stats a tu disposición. Esto al final resulta en que tu personaje no se encasillará en ningún aspecto al final del juego, algo que puede ser malo o bueno según el manejo de los puntos de habilidad que uses.

Una enorme puerta de entrada para los que aún tenían dudas - ¡Comparte!

Ahora bien, todo esto está perfecto, pero durante tu partida, y al ser un mundo abierto genérico, las misiones secundarias serán una plaga para todo. Nada más comenzar, el tutorial para aprender algunas mecánicas como crear objetos y demás será como una barrera de entrada para muchos. Si no superas esta misión, no es porque era difícil, sino por lo aburrido y abrumador que es que te corten el rollo para explicar algo con diálogos lentos y cinemáticas innecesarias. Y así son las secundarias, el típico recado de ir a recoger algo para luego dar la vuelta y entregarlo; lo peor que le pudo pasar a Biomutant.

Por último, quiero mencionar los diálogos y su intrusión dentro de la jugabilidad de Biomutant; pues dispuestos a hablar de lo malo, esto en verdad es un craso error. El juego cuenta con un narrador, que al menos en la versión en español, es una voz plana sin personalidad que te saca de la experiencia. Los personajes tampoco se salvan, pues como tal no tienen una voz, lo que hacen es balbucear algo en un idioma inventado para que el narrador plano te cuente lo que dicen; quiero decir, es una atrocidad.

Valor como versión next-gen

Si eres como yo, que no había probado el juego desde su salida, probablemente esta versión sea una forma llamativa para que le des una oportunidad; si bien el juego base no cambia mucho, la calidad de vida del mismo es inmejorable. Puede gustarme más o menos la forma de presentar su mundo, la jugabilidad o los diálogos, pero es innegable que es un juego competente y que se ve muy bien; además de correr de maravilla.

Biomutant tuvo muchas críticas por este apartado, y ahora con su versión de nueva generación, es una puerta de entrada gigantesca para los que tenían dudas.

Conclusión

A pesar de todos los prejuicios fundados e infundados sobre el juego, debo decir que Biomutant es un buen juego. La experiencia es gratificante y frustrante a la vez, pues es un producto con mucho potencial que peca de ser ambicioso y demasiado genérico en algunos aspectos. No quiero decir que es una obra sobresaliente, pero si dejar claro que vale la pena probarlo y entrar en su mundo.

David Fernández