Albion sigue necesitando héroes

Ya han pasado 12 años desde el lanzamiento del primer Fable y seguimos echando de menos la franquicia.

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Hace ya 12 años, se lanzó en el mercado norte americano Fable para Xbox, desarrollado originalmente por el estudio Big Blue Box con el respaldo de Lionhead Studios y distribuido por Microsoft Game Studios, seria exclusivo de Xbox hasta que el 20 de Septiembre de 2005 llegaría la versión de Windows llamada: Fable: The Lost Chapters, una edición que traía mejoras al juego junto a una expansión de la historia la cual se encargó de desarrollarla Lionhead enteramente

Un mes más tarde, el 18 de Octubre, The Lost Chapters aterrizaría en Xbox y llegaría como descarga digital al bazar de Xbox 360. En Febrero de 2014 se lanzaría Fable Anniversary, un remake que manteniendo el juego intacto mejoraría exponencialmente sus gráficos gracias a Unreal Engine 3 y así poder recorrer de nuevo el universo del juego con un aspecto impecable, en el mismo juego se añadía The Lost Chapters y en Septiembre de 2014 llegó la versión de Windows .

El primer Fable para la época, lucía genial.

En 12 años pasan muchas cosas y desde luego en esta saga ha pasado de todo, desde su brillante segunda entrega hasta el olvidable Journey y pasando por Fable Legends, su apuesta por un mundo multijugador para Xbox One y Windows 10 que fue cancelado el pasado 7 de Marzo junto con el cierre de Lionhead Studios por parte de Microsoft. Tras este batacazo para los fans, nada hemos sabido después sobre la saga ni sobre su devenir.

Con 6 juegos en su haber, quiero transmitir lo que me produjo recorrer por primera vez la región de Albion siendo un persigue pollos. Conocer las mágicas tierras de fantasía desde la niñez, haciendo recados para conseguir un regalo de cumpleaños a nuestra hermana, pudiendo elegir si conseguirlo haciendo el bien o el mal era increíble. Evidentemente, siendo un niño todo se traducía en meterse en líos, nada importante a priori. Fable era único, un mundo de fantasía vivo y lleno de cosas por hacer. Decisiones morales y hasta políticas se mezclaban en el juego.

Fable Journey, el menos apreciado de todos basaba su jugabilidad en Kinect.

Y es que la franquicia Fable no solo ha sido y será un antes y un después en el catálogo de Xbox, también supone un paso hacia adelante en la toma de decisiones morales y éticas y ayudó a propiciar mayor madurez en un sistema que hasta su llegada era impopular.

Solo me queda soñar con que Microsoft algún día nos deleite con un Fable IV, Albion sigue con la sombra de la oscuridad en su acecho y la tercera entrega dejó muchos interrogantes abiertos.