Un desarrollador de Wargaming nos explica el porqué tienen que limitar estas dos características siempre en las consolas actuales.
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Con la presentación de las nuevas consolas, todo el mundo creía que los 1080p y los 60fps iban a estar a la orden del día, y en cierto modo es así, si hubieran utilizado la misma tecnología gráfica que teníamos con Xbox 360. Es cierto que las nuevas consolas son 8 veces más potentes que sus antecesoras, pero, ¿porqué siguen sin poder llegar cómodamente a estas cifras que muchos jugadores ansían?
La respuesta nos la da TJ Wagner, Director Creativo en WarGaming que ha hablado en una entrevista para Gamingbolt.
«Esto pasa en cada generación. El hardware es tán rápido, que podemos hacer cualquier cosa. Pero al final, resulta en poner más de todo (más texturas, más polígonos, más efectos, más iluminación) y vuelves a los mismos antiguos problemas de resolución.»
Evidentemente se trata de lo que muchos usuarios pensabais y habéis dicho en vuestros comentarios una y otra vez, tener mejores gráficos priman sobre resolución y tasa de frames. Porque, ¿de qué te sirve un juego a full HD y a 60 frames, si se ve igual que los de Xbox 360? Los desarrolladores opinan lo mismo.
Los resultados saltan a la vista, con maravillas como Ryse a 900p o Rise of the Tomb Raider a 30fps, que nos muestran una capacidad tecnológica en esta generación muy superior a la anterior.
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