Paradox admite el fiasco de Bloodlines 2: pérdidas de 37 millones y asume la culpa

Paradox culpa a su propia gestión por el fracaso comercial de Bloodlines 2.

Más historias en la categoría Noticias

No te pierdas nada y ¡Síguenos en Google News!

El regreso de Vampire: The Masquerade era uno de los movimientos más ambiciosos de Paradox en años, pero su estreno no ha acompañado las expectativas internas. La editora ha confirmado una depreciación de 355 millones de coronas suecas (unos 37 millones de dólares) relacionada con el lanzamiento de Bloodlines 2, después de comprobar que las ventas iniciales y la recepción general quedaban por debajo de las previsiones.

Según estimaciones de GameDiscoverCo, el juego habría vendido aproximadamente 121.500 copias en Steam, generando cerca de cuatro millones de dólares en ingresos netos. En la plataforma de Valve mantiene valoraciones “mixtas”, una tendencia similar a la reflejada en Metacritic.

Paradox reconoce el error en sus previsiones

Frederik Wester, CEO de Paradox, ha querido asumir la responsabilidad directamente. Para él, el trabajo del estudio responsable del proyecto ha estado a la altura, pero las expectativas internas no se han ajustado a la realidad del mercado.

Estamos satisfechos con el trabajo del estudio y con la fantasía vampírica que ofrece el juego, explicó en el comunicado. Tras un mes podemos ver que las ventas no se alinean con nuestras proyecciones, lo que nos obliga a aplicar esta depreciación. La responsabilidad recae por completo en nosotros como editora.

Wester admite también que Bloodlines 2 se aleja de las áreas más habituales del catálogo de Paradox, lo que habría dificultado realizar previsiones fiables. Aun así, la compañía confirma que los dos contenidos adicionales previstos siguen en desarrollo y llegarán como estaba planeado.

Un desarrollo largo, turbulento y con varios cambios de rumbo

El proyecto arrastra un recorrido muy peculiar. Paradox compró la licencia en 2015 y el desarrollo inicial recayó sobre Hardsuit Labs, responsables de una propuesta más cercana al clásico de 2004. Pero al final, tras retrasos, cambios creativos y problemas internos, la editora decidió cortar la colaboración y reiniciar la producción.

El relevo lo tomó The Chinese Room, que acabó entregando una experiencia más compacta y centrada, alejándose de la escala del título original. Esa dirección más contenida, anticipada incluso por el equipo creativo en entrevistas pasadas, acabó chocando con parte del público que esperaba una secuela más expansiva.

Un cierre de año muy intenso para Paradox

A pesar de este revés, Paradox ha registrado un aumento del 20% en el beneficio operativo durante los nueve primeros meses del año. La compañía asegura que el cuarto trimestre será “el periodo más intenso” de su historia, con hasta tres lanzamientos y múltiples actualizaciones para sus franquicias principales.