Si la guía de tu Xbox Series X tarda en abrirse, hay una solución rápida y sencilla.
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Muchos jugadores han reportado que, después de varias horas de uso o tras navegar por la biblioteca completa, la guía de Xbox Series X se vuelve más lenta o tarda unos segundos extra en aparecer al pulsar el botón Xbox. Aunque el resto de juegos y aplicaciones funcionan sin problema, este pequeño retraso puede resultar molesto con el tiempo.
Por suerte, la causa es bastante común: una caché saturada o fragmentada que se acumula tras sesiones largas o el uso continuado del modo ahorro de energía. Y lo mejor es que se puede solucionar en menos de un minuto.
Paso a paso: cómo hacer un reinicio completo en Xbox Series
El procedimiento más efectivo para resolver este tipo de errores menores es realizar un reinicio completo, también conocido como cold boot o arranque en frío. Este proceso borra la caché temporal del sistema sin eliminar tus juegos, aplicaciones ni configuraciones personales.
Sigue estos pasos:
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Enciende tu consola y asegúrate de que esté en el menú principal.
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Mantén pulsado el botón de encendido de la consola (no el del mando) durante unos 10 segundos, hasta que se apague por completo.
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Espera unos segundos y enciéndela de nuevo.
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Cuando el sistema se reinicie, la caché se habrá limpiado y la guía debería abrirse con normalidad.
Este método también ayuda a resolver otros fallos menores, como cuelgues al abrir aplicaciones, retrasos en el menú o errores en la sincronización con la red de Xbox.
Consejos adicionales para evitar que vuelva a ocurrir
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Usa el modo de encendido instantáneo si sueles jugar a menudo. En algunos casos, el modo ahorro de energía puede ralentizar la carga inicial de la guía.
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Reinicia la consola cada cierto tiempo, especialmente si pasas largos periodos sin apagarla completamente.
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Evita sobrecargar la memoria con demasiadas apps en segundo plano: cierra los juegos o aplicaciones que no estés usando.
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Si el problema persiste, puedes restablecer el sistema sin borrar datos desde Configuración → Sistema → Información de la consola → Restablecer y conservar mis juegos y aplicaciones.
Os aseguramos que con estos sencillos pasos se soluciona el problema en la mayoría de los casos, devolviendo la fluidez al sistema sin necesidad de medidas más drásticas.
En Generación Xbox seguiremos compartiendo guías prácticas para mantener tu consola en perfecto estado y sacarle el máximo rendimiento cada día.

