Los rumores apuntan a una nueva consola de Microsoft con Windows y soporte para tiendas externas como Steam y Epic Games Store.
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Las especulaciones sobre la próxima generación de Xbox apuntan a un cambio sin precedentes en la estrategia de hardware de Microsoft. Diversas filtraciones sugieren que la compañía prepara un sistema híbrido entre consola y PC, capaz de ejecutar Windows y acceder a múltiples plataformas digitales, incluyendo Steam y la Epic Games Store, además de la Xbox Store tradicional.
Sin embargo, la gran pregunta que muchos jugadores se hacen es si Microsoft permitirá que los usuarios que ya tienen un PC compatible puedan ejecutar directamente su biblioteca de juegos de Xbox sin necesidad de adquirir la nueva consola. La idea suena atractiva para quienes ya disfrutan del ecosistema Xbox en ordenador, pero también podría poner en riesgo el modelo de negocio basado en hardware propietario.
Una consola con arquitectura abierta, pero controlada
Expertos en la industria creen que la clave está en los nuevos procesadores personalizados que Microsoft desarrolla junto a AMD, los cuales incluirían funciones exclusivas de seguridad y rendimiento. Estas características harían imposible replicar por completo la experiencia Xbox en un PC convencional, al menos sin una licencia oficial.
No obstante, hay quienes apuntan a una posible apertura del ecosistema: Microsoft podría licenciar su tecnología a fabricantes de ordenadores para crear dispositivos certificados “Xbox Ready”, capaces de ejecutar juegos de consola de forma nativa. Este enfoque ampliaría la compatibilidad sin romper la estructura del ecosistema, ofreciendo más opciones al jugador sin perder control sobre la plataforma.
Por ahora, no hay confirmación oficial, pero el supuesto precio de lanzamiento de 1.200 dólares y las menciones a una integración completa con Windows avivan el debate sobre el futuro del hardware de Xbox. Si se cumple lo que muchos anticipan, la próxima generación podría borrar definitivamente la línea que separa al PC de la consola, consolidando el modelo más flexible de la historia de Microsoft.

