El director de clásicos como Jurassic Park llegó a presentar su visión, pero el control creativo fue el problema.
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Pocas figuras en la historia del cine tienen tanto peso como Steven Spielberg, y sorprende descubrir que el director también quiso dejar su huella en el mundo de los videojuegos. Según nueva información, el cineasta no solo mostró interés en Call of Duty, sino que incluso presentó a Activision su idea para llevar la franquicia bélica a la gran pantalla.
Spielberg, que es jugador habitual de la saga, defendía un proyecto con un enfoque realista y centrado en la guerra, pero con una condición clara: quería tener control total sobre la producción y el montaje final. Ese detalle fue suficiente para que en Activision se encendieran las alarmas, ya que la compañía prefería mantener mayor control sobre cualquier adaptación de su licencia.
Call of Duty, entre Activision y Hollywood
Tras escuchar la propuesta, Activision decidió no seguir adelante con Spielberg y optó por vender los derechos de la franquicia a Paramount Pictures, un estudio con el que se sentían más cómodos en cuanto al control creativo.
De esta forma, la película de Call of Duty nunca llegó a materializarse bajo la dirección de Spielberg, lo que sin duda habría supuesto un golpe mediático de enorme magnitud para la franquicia. No obstante, este episodio refleja el interés real de Hollywood por transformar sagas de videojuegos en superproducciones cinematográficas, un camino que cada vez cuenta con más ejemplos.

