Además, el nuevo título de Bethesda Game Studios llegaría a partir de 2026.
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Parece que sigue habiendo algo de confusión con la supuesta exclusividad del futuro The Elder Scrolls 6. Phil Spencer ha dicho en alguna que otra ocasión que si, que será exclusivo, pero recientemente y tras la polémica con Starfield, quizá queriendo calmar los ánimos, aseguró en su ambiguedad habitual, que como habían dicho al comprar Bethesda, cada exclusividad sería estudiada caso por caso.
Sin embargo, hoy han salido un buen puñado de pruebas que se ha desclasificado del juicio de Microsoft contra la FTC por la compra de Activision Blizzard y entre ellas, un esquema bastante significativo en el que podemos ver la trayectoria de los títulos lanzados por Zenimax Studios desde 2018, para reflejar la tendencia de Microsoft con los nuevos títulos lanzados, entre los que se encuentran Starfield, Redfall y The Elder Scrolls VI, que curiosamente, se marca como que no va a salir en PlayStation.
Starfield ha sido un éxito y posiblemente sea la estrategia a seguir
Señalamos en este caso a Stephen Totilo, de Axios, que está desglosando toda esta información, que incluso en este caso de la exclusividad, también recalca que la propia Microsoft le dijo a la FTC textualmente que The Elder Scrolls VI podría lanzarse solo en Xbox y PC. Esto, más que ser algo firme, da validez a sus intenciones con la secuela de Skyrim, en la que claramente piensan que debería de ser exclusiva de sus máquinas.
Starfield mismamente ha confirmado su éxito con el pico de jugadores, gran posición de ventas en Europa y una crítica que, por lo general, alaba lo nuevo de Bethesda. Lo cierto es que no podríamos compararlo con otro lanzamiento de una magnitud tan grande, así que es el mejor ejemplo que tomar de igual manera. Esto será un vaivén de declaraciones los próximos años en los que dependiendo del prisma desde el que las miremos, parecerá que será exclusivo o no, así que esto es el comienzo de una nueva batalla que Microsoft debería de dejar clara lo antes posible para fidelizar futuros usuarios, que puedan decir: “Si quieres jugar a TES VI, debes tener una Xbox”.