Os traemos nuestras primeras impresiones del regreso de uno de los juegos que marco el género de los RTS: Age of Empire III.
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Uno de los máximos exponente del género RTS es, sin ningún tipo de duda, Age of Empires. La saga marcó un antes y un después en el género, en especial si segunda entrega. Ahora, casi veinte años después de su reinado, Microsoft está reviviendo la franquicia, allanando el camino para el futuro y ya anunciado Age of Empires IV. ¿Cómo? Trayendo de vuelta los clásicos atemporales. Algo que ya hemos visto con Age of Empires: Definitive Edition y Age of Empires II: Definitive Edition, cuyo análisis puedes leer aquí, y próximamente podremos disfrutar del tercer juego.
De este modo, Age of Empires III: Definitive Edition cerrará el circulo, permitiendo a los jugadores redescubrir una entrega que presentó grandes novedades en su lanzamiento, con algunas ideas adelantadas a su tiempo. Y nosotros ya hemos tenido la ocasión de probar esta nueva versión durante varios días, y os podemos adelantar que como sus predecesores, es una revisión muy buena que mantienen todo el encanto de la saga.
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Una actualización gráfica digna de un cambio de época
Lo primero que tenemos que destacar es el apartado visual y técnico del juego. Como si de una actualización de nuestra civilización se tratara, Age of Empires III: Definitive Edition presenta una buena mejora gráfica. Con opción a 4K y 60fps, el título se muestra con un imponente apartado gráfico. El lavado de cara se nota, siendo mucho más detallado en cada aspecto, además de contar con unas fisicas mejoras y que, al igual que la segunda entrega, se notan en la caída de cada edifición, siendo más orgánica y realista.
Por otro lado, el apartado técnico del juego es inapelable. Es cierto que siendo un versión previa al lanzmaiento nos hemos encontrado con algún pequeño tiron de fps, algo normal no siendo la versión definitiva y que llegará al mercado. Aunque eso sí, tenemos que decir que han sido de manera muy puntual y de forma esporádica. Por lo demás, el juego no presenta ningún bug o fallo que haya impedido disfrutar de nuestras partidas.
Nuevos rivales y nuevos modos de enfrentamiento
Pasando directamente a las novedades que presenta Age of Empires III: Definitive Edition, nos encontramos con dos modos de juego totalmente nuevos. Uno de ellos son las Batallas Históricas, que nos ponen al frente de diferentes ejércitos en momento bélicos cruciales de la historia. En esta primera toma de contacto tuvimos la ocasión de jugar a la batalla de Argel, que tuvo lugar en el 1516 entre los Beberiscos y los Españoles. En esta ocasión, tomaremos el papel de los beberiscos en su intento de defender la ciudad del ataque de los españoles.
Estas son partidas en las que tendremos que cumplir determinadas condiciones de victoria para salir airosos de ellas. Además, irán apareciendo diferentes objetivos secundarios que podrían ayudarnos con mejoras o ayudas de poderosos aliados.
Junto a las Batallas Históricas, el otro gran añadido que presenta Age of Empires III: Definitive Edition es El Arte de la Guerra. Este es un modo de misiones de desafío que nos permitirán conocer todos los detalles del juego. Además, nos servirá como práctica para mejorar nuestra destreza como generales en el campo de batalla y en la organización de nuestras bases.
Con un sistema de medallas, podremos enfrentarnos a diferentes desafíos de corta duración que nos pondrán en todo tipo de situaciones. Desde conseguir tesoros en menos de 3 minutos hasta conseguir ganar ciertas batallas con el mínimo número de bajas posibles.
Aparte de estos nuevos modos de juego, nos encontramos con el clásico Escaramuza, donde podremos competir contra otro jugadores o contra la propia IA en los modos más míticos de la saga. Por supuesto, el Modo Historia vuelve, con las campañas del juego original, incluyendo todas las que se añadieron en diversas expansiones tras su lanzamiento. Nosotros hemos tenido la ocasión de jugar la campaña de los Caballeros de Malta y sigue ofreciendo algunos de los mejores momentos en un RTS.
Otro de los añadidos de esta nueva versión son las dos nueva civilizaciones con las que podremos jugar: suecos e incas. Estas se unen a las ya 14 iniciales, dándonos una amplía variedad de civilizaciones, entre las que se encuentran los ya citados españoles o beberiscos, además de británicos, franceses, mayas y chinos.
Por último, en cuanto a jugabilidad pura y dura, Age of Empires III: Definitive Edition no presenta grandes novedades, manteniendo la base y las ideas del juego original. Con un sistema clásico dentro de los RPG, esta entrega se caracterizó por la inclusión de la Metrópolis, una idea muy ad hoc para la época que representa. Esta nos permitirá mejorarla y preparar una baraja de mejoras personalizada, ajustando así siempre para nuestro modo de juego.
Estas mejoras podremos reclamarlas en cada partida consiguiendo puntos de experiencia, lo que nos permite solicitar una. Estas van desde recursos y tropas, hasta mejoras para edificios, construcción más rápida, etc.
Age of Empires III, mejor que nunca
En definitiva, nuestra primera toma de contacto con Age of Empires III: Definitive Edition nos ha dejado muy satisfechos. El juego mantiene toda la esencia del original, añadiendo dos modos de juego que amplían las opciones y ofrecen desafíos para todos los jugadores. Además, las novedades jugables que presentó en su día, como la inclusión de la Metrópolis, se notan que realmente fueron una evolución que en su momento no se le dio un mayor valor.
Sin ningún tipo de duda, y a expensas de poder disfrutar de la versión final del título, esta revisión es una ocasión ideal para redescubrirlo. Un juego que, aunque no alcanza la excelencia de su predecesor, cuenta con buenas ideas, un buen número de civilizaciones y garantiza una buena dosis de acción histórica. ¿Estáis listos para el nuevo mundo?