Gears 5 recoge el testigo de Xbox Game Studios de ser el exclusivo imprescindible de esta generación. Más grande, mejores gráficos, todo un "vendeconsolas".
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Gears of War es hoy día una saga casi necesaria en la industria de los videojuegos. En un mundo en el que el público ha aumentado su sensibilidad hasta límites insospechados, que siga habiendo un videojuego de referencia en el que uno de sus iconos más representativos sea un rifle con una motosierra incorporada, dice mucho y bueno de la franquicia. De hecho, Gears of War (Ahora solo Gears) es precisamente para los videojuegos como un Lancer en un armero. Es útil, necesario, efectivo, es increíble, luce amenazante, pero de alguna manera, resulta un elemento fuera de lugar en 2019. Y precisamente eso es lo que intenta solucionar Gears 5.
The Coalition, con Rod Fergusson a la cabeza, recogió el caliente testigo de Epic Games y de un Cliff Bleszinski siempre inspirado que gracias a Gears of War ha quedado para siempre en el podio de los desarrolladores más importantes de la industria. El primer trabajo desde que la IP ha formado parte de Microsoft y la primera entrega numerada para Xbox One, Gears of War 4, ya dió buena cuenta de lo que es capaz de hacer el estudio. Una campaña potente y un multijugador enorme que dejó más que satisfechos a muchos fans, con una nueva historia abierta que mostraba a un nuevo plantel de protagonistas llenos de carisma sin olvidar a la antigua guardia, con el imprescindible Marcus Fénix a la cabeza.
Sin embargo, a pesar del sobresaliente técnico, el hito conseguido en Xbox One y el haber completado con éxito una delicada transición, quedó en el tintero una cuestión importante, que incluso el propio Fergusson reconoció posteriormente: no querían arriesgar con nuevas propuestas para afianzar a los fans de la saga dándoles lo que necesitaban. Pero ahora es el momento con Gears 5. ¿Lo han conseguido realmente? ¿El misterioso halo que envuelve a la campaña está justificado?
Antes de nada, un detalle, para aquellos que se sientan perdidos en este universo o quieran refrescar rápidamente la memoria. En el apartado Extras del menú principal, tendréis un magnífico resumen de Gears of War 4 y otro del estado actual de la franquicia, un detalle genial que seguro que agradeceréis tanto como yo.
Gears 5 comienza poco tiempo después del final de la cuarta entrega. El nuevo grupo formado por J.D, Del y Kait definitivamente trabaja para la CGO (Coalición de Gobiernos Ordenados) bajo el mando de la primera ministra Jinn, la cuál ha decidido juntar de nuevo a todos los pueblos, incluso a los forasteros, para aunar fuerzas ante los ataques del Enjambre, que recordamos, son los mismos Locust que después de 25 años han vuelto a aparecer más fuertes que nunca. Una serie de visiones y dolores de cabeza hacen que Kait se sienta continuamente descentrada en su labor y un evento termina por sacar a la luz el enigma que escondía en su interior. Sobre esta incertidumbre de Kait será donde gire toda la trama de Gears 5, con un desencadenante inesperado y brutal.
Evidentemente, el párrafo anterior es lo máximo que os podemos contar para no lanzar a diestro y siniestro spoilers, que en esta entrega pueden ser dañinos para el jugador, y precisamente por lo que entendemos el secretismo alrededor de la campaña. Si queréis disfrutar de la nueva campaña al máximo, os recomendamos que no indaguéis mucho en redes, porque son bastante fáciles de describir. Solo podemos decir que por primera vez en la saga habrá un final inesperado, y amig@s míos… realmente no se como tiene pensado The Coalition solucionarlo en un supuesto Gears 6. Y eso, nos produce una placentera inquietud.
Kait se convierte en el eje de la aventura, pero como siempre, contaremos con la participación de todos los viejos conocidos, como la familia Fénix, que deja el testigo de protagonista a la hija de Reyna. Pero no temáis, la sensación de grupo, de equipo y de “Hermanos hasta el final”, se sigue respirando en cada segundo de Gears 5. Como ya sabréis, contaremos con un nuevo miembro, que la verdad es que tiene carisma suficiente (y músculos) para unirse. Fahz Chutani es un sargento de la CGO que trabajará junto a J.D. Y por supuesto, para los que se lo preguntaban, Cole Train también estará para brindarnos algunos de los momentos más divertidos de la campaña.
Gears 5 es un juego enorme y seguramente ocupará los próximos meses de vuestra vida (o años), tal y como lo han hecho las anteriores entregas. Y en este calificativo entra todo su gigantesco multijugador: un nuevo modo Escape del que ya comprendemos que se le diera tal importancia en el E3, un sistema de héroes con habilidades muy interesante para la Horda, un modo Arcade para el multijugador más clásico que lo hace más accesible a todo el mundo y de un sistema de economía que con sus particularidades, seguro que dejará más satisfechos a los que no quedaron contentos con el anterior. Este es sin ninguna duda el Gears más grande hasta la fecha.
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Apartado técnico
Gears 5, como se veía venir, luce absolutamente espectacular. Es una montaña rusa gráfica que nos dejará grandes momentos en la retina, con posiblemente, los escenarios y estampas más bellas de todas las entregas. Solo con ver algunas de las capturas que acompañan el análisis veréis de lo que hablo. The Coalition ha hecho un trabajo artístico excelente en el que al fin se despega de ese tono grisáceo con una gama de colores en los que tal y como podíamos adivinar, predominan el azul y el rojo.
Como no podía ser de otra forma, hemos jugado en Xbox One X y Gears 5 consigue sacar el máximo de la potente máquina, que incluso en ocasiones ha resoplado más de lo que debería, quizá gracias a los 60 fps a los que se mueve la campaña. Una de las grandes bazas que ha sido diferenciadora para que la jugabilidad y agilidad del multijugador también se disfrute en la historia es precisamente eso, los frames por segundo. Incluso en los mapas más abiertos en los que tendremos amplios escenarios para explorar con el Esquife, el juego se mueve de maravilla y por supuesto, a resolución 4K.
Con esta proeza técnica, los colores vivos aumentados con un gran uso del HDR, los escenarios convenientemente renovados y ampliados, Gears 5 es un gozo para los sentidos.
El Unreal Engine hace su trabajo como debe, con un repertorio de reflejos, partículas, iluminación -que en interiores es maravilloso-, y una resolución de texturas en los personajes muy bestia, sobre todo a la hora de pasar a las cinemáticas totalmente creadas con el motor del juego en tiempo real. Dependiendo del detalle, hay ocasiones en las que bajan los fotogramas a los 30 fps en las cinemáticas. Es más, en todo el juego, solo un pequeño vídeo está pre-renderizado y lo notaremos rápidamente. Todo lo que veréis a partir de hoy en capturas de pantalla, tened claro que está renderizado en tiempo real con el motor del juego. Incluso la nieve y la arena se deformarán a nuestro paso.
Sería algo hipócrita si no mencionara que a pesar de todos estos calificativos, he observado algunos escenarios menos cuidados en su detalle, sobre todo en las zonas abiertas en las que algunos segmentos están bastante faltos de polígonos o resolución, esto empaña un poco la experiencia. También hemos podido observar un exceso de “puertas”, de las que tendremos que abrir con nuestro compañero, con animaciones que se repiten una y otra vez y que seguramente esconden las pantallas de carga que no podemos ver. Mención especial a la transición entre cinemática y juego.
Aunque se podría criticar que el diseño de los escenarios con las coberturas a media altura tan características de la saga prácticamente avisan de los enfrentamientos más grandes, en Gears 5 se nota un importante esfuerzo para que no sea así. En ciertos momentos resultan inevitables, pero también hemos notado que The Coalition se ha armado de artimañas continuas para que se desvanezca esta sensación con la que los fans de la IP no tienen problema alguno, pero los menos crédulos podrían seguir viendo este aspecto como un problema de estancamiento, cuando realmente es casi una seña de identidad.
Para rematar un juego digno de una producción de Hollywood, Gears 5 tiene una banda sonora brutal, desde la propia música del menú del juego pasando por las melodías de las que disfrutaremos a lo largo del juego, que son épicas, contundentes y expresarán en todo momento lo que el título nos quiere transmitir. En esta ocasión solo podemos poner una pequeña pega a unos efectos sonoros sobresalientes señas de la saga, ya que cada vez que le reventemos la cabeza a un enemigo, una mecánica actualizada que cobra especial importancia, nos sonará como si hubiera sido cerca. Interpretamos que The Coalition quiere que el jugador sepa sin tener que mirar que ha hecho un impacto en la cabeza, pero en tiroteos intensos ese sonido de masa cerebral explotando, resulta un poco irritante.
Y el eterno dilema del jugador español de Xbox y por lo que debéis de comprar Gears 5 sin pensarlo: el doblaje también es digno de las grandes producciones. Las expresiones de nuestros personajes favoritos tendrán voz española en castellano como debe de ser y respetando a los de siempre. Es decir, Marcus será nuestro Marcus. Sólo se nos escapan algunos personajes del multijugador como Sarah Connor o los Spartans de Halo Reach, que directamente hablarán en inglés, pero como podéis ver, la factura técnica de Gears 5, aparte de ser enorme, es impagable.
Jugabilidad
Gears 5 se mantiene inalterable con el paso del tiempo y su jugabilidad siempre parece fresca entrega tras entrega. Es cierto que hay muchos jugadores que le piden una renovación más profunda a la saga, un cambio radical, que evolucione a un nuevo nivel. Jugadores entre los que me incluyo. Gears siempre es disfrutable, pero mientras los fans piden que no “inventen” mucho para no cargarse la franquicia, hay otro sector de jugadores que pide a gritos una renovación. Después de haber pasado más de 30 horas entre la campaña y el multijugador, solo podemos decir una cosa: posiblemente Gears 5 es perfecto tal y como lo debería de ser para su público.
Ya tenemos aventuras narrativas, ya tenemos títulos battle royale, ya tenemos juegos de mundo abierto con decenas de horas de misiones secundarias. Pero no es el rollo de Gears. En esta quinta entrega hemos visto como una de las grandes bazas que se han espetado como novedades son mecánicas de mundo abierto y RPG. Y sinceramente, no sabía cómo las incorporarían. Temía que pasara lo que sucede en el 90% de los casos: alargar innecesariamente una historia que no lo necesita solo por alardear de más horas de juego. Por suerte y para sorpresa de todos, no es así.
En un par de actos solamente y totalmente dirigidos por una narrativa firme y lineal, tendremos la libertad de explorar dos escenarios abiertos con uno de los protagonistas, el Esquife, un vehículo en el que nos deslizaremos por el hielo o el desierto rápidamente gracias al viento, como si de un parapente terrestre se tratara. Si os lo estáis preguntando, el vehículo no estará armado, así que no será más que un mero transporte. En estas zonas de exploración tendremos hasta un mapa donde podremos marcar objetivos o ver zonas sin explorar, donde precisamente encontraremos variedad de misiones secundarias, más interesantes de lo que esperaba porque mientras hay algunas que se limitan a recoger piezas para mejorar a Jack, otras tendrán hasta historias interesantes. Pero en definitiva, un motivo más para explorar y sobre todo DISFRUTAR de unas vistas espectaculares a la vez que nos relajamos, algo que ocurre por primera vez en 5 entregas.
Con respecto a las mecánicas RPG, el responsable de esta coletilla no es otro que Jack, el silencioso protagonista que lleva acompañando a Delta desde hace años, pero nunca ha tenido más protagonismo que el de hacer de “hacker”. En Gears 5 gracias al trabajo de Baird, tendremos una nueva versión muy superior que nos permitirá contar literalmente con un miembro más en el equipo, siendo el tercer jugador en el modo cooperativo de la campaña. La tarea de Jack consiste en ser apoyo del grupo, gracias a sus nuevas habilidades. Comenzaremos con un rastreo de la zona para señalar a los enemigos, pero conforme vayamos reuniendo mejoras, Jack podrá lanzar destellos a los enemigos (ideal para sacarlos de la cobertura), proporcionarnos una armadura extra, hacernos invisibles o incluso lanzar un escudo. Además, en nuestro camino encontraremos puntos de mejora para el mismo. Puntos que podremos gastar en habilidades pasivas -aquí están las supuestas mecánicas RPG-, pero que sin jugar en dificultades altas o estando en solitario, no se notan demasiado.
Por otro lado, las habilidades que no son pasivas, al poder ordenárselas a Jack, nos serán de gran ayuda para librarnos de aprietos o proporcionarnos el empuje necesario para poder terminar más de una lucha. Un interesante toque en las batallas como apoyo que se convierte uno de los puntos diferenciadores de Gears 5. Hablando de nuevas mecánicas, tenemos un mayor protagonismo de las armas melee, que ahora en lugar de golpear con el arma usaremos un cuchillo con un pequeño combo, el mismo que ya vimos tímidamente en Gears of War 4. A esto, se une la Maza Rompedora, un arma que sólo portan los Warden, unos enemigos enormes casi invulnerables que de por sí aportan también unas luchas muy entretenidas, teniendo que esquivar sus golpes y embestidas como si de un Dark Souls se tratase, rodando por el suelo.
Otra novedad en la saga es la posibilidad de usar el sigilo para matar a los enemigos. Si están deambulando por alguna zona, nos será sencillo acercarnos por detrás y eliminarlos de un solo golpe, algo que nos librará de algunas batallas innecesarias, aportando otro soplo de aire fresco en la jugabilidad, pero que realmente es algo que ya hemos visto en muchos otros títulos.
El resto, permanece casi inalterable. Las ejecuciones, los agarres desde coberturas, la agilidad del wall bouncing, todo es prácticamente igual, pero parece que de algún modo Gears 5 gana ligereza en el manejo de los personajes, sintiéndose más livianos y capaces, incluso con un nuevo movimiento que nos permite correr directamente hacia atrás. Por supuesto, un sistema más fresco, que también se extiende al multijugador en todas sus facetas.
Duración
Gears 5 es enorme, un juego extremadamente completo en todas sus facetas, pero la campaña no es tan larga como se venía rumoreando. A pesar de todo lo que habéis podido leer hasta ahora, he conseguido terminarla en 10 horas, eso sí, con sólo un 75% del juego completado, lo cual dice mucho de lo que me he podido dejar atrás de misiones secundarias sin hacer. Pero muy alejado de las 20 horas que hemos llegado a leer en estos últimos días. Duración que por otra parte, me parece perfecta, porque detrás de la campaña se esconden coleccionables repartidos por todo el mapeado e incluso armas especiales, como francotiradores que al hacer recargas perfectas quedan con dos balas en el cargador, detalles que primarán el estar atentos a todo el escenario.
De hecho, si queréis un reto interesante, os recomendamos que directamente paséis a la dificultad difícil, ya que en algunos tramos el intermedio se nos ha hecho mucho más sencillo de lo que esperaba. Y por supuesto, el cooperativo queda recomendadísimo, la segunda vuelta que he podido empezar ya nos muestra algunos caminos que no ves en el trayecto habitual para un solo jugador. Luego le sumas la dificultad, los logros… y bueno, comprendednos ¿realmente que amante de Gears se lo pasa una sola vez y ya está?
Multijugador
Escape, Enfrentamiento y Horda
Dejando a un lado el modo campaña, nos queda todo el aluvión de información sobre el modo multijugador de Gears 5, el que realmente hace que se convierta en uno de los títulos más jugados de Xbox One semana tras semana. Hemos podido probar todos los modos, aunque menos en profundidad el más clásico Enfrentamiento, que debido a los pocos jugadores que hay en estos días, solo nos hemos podido remitir a las listas personalizadas, abrir una partida y confiar en que entre algún otro alma igual. Por suerte, estas listas personalizadas en las que veremos las partidas disponibles como los antiguos listados de servidores de toda la vida, nos sirvieron para encontrar gente y comprobar de primera mano que la estabilidad del multijugador es genial, con un ping muy estable y partidas sin lag alguno.
El matchmaking ha sido algo imposible, pero de manera manual si que hemos podido jugar a todo y por suerte, hemos podido coincidir para Hordas, Escapes y algún que otro enfrentamiento. Quizá muchos no activaron la visibilidad de sus partidas, algo que viene desactivado por defecto, porque las opciones de partida en Gears 5 son completísimas. El modo Arcade es sin duda la novedad más significativa del multijugador más tradicional de Gears, añadiendo habilidades de héroes y facilidades a los jugadores para comprar armas con las estrellas que ganemos al derribar enemigos. Sencillo, sin depender de la mancopeta Gnasher, hemos podido observar como Gears también funciona perfectamente como un título tradicional, usando menos las coberturas y buscando más la habilidad del tiro en la cabeza que la estrategia habitual.
Para los Wall-bouncers, también tienen su hueco bien calentito y estarán felices de volver al competitivo modo de Escalada, que será su particular preparación para los eSports. Por otra parte, las partidas rápidas permitirán entrar rápido en cualquiera de las opciones, que contienen 12 mapas para disfrutar (compartidos con el modo Horda), con los modos que ya conocemos de la saga: Carrera armamentistica, Dodgeball, Escalada, Ejecución, Guardián, Rey de la colina, Duelo por equipos y Zona de guerra.
Pasamos ahora por la Horda 4.0, que no ofrece tantas novedades como podría parecer aparentemente, sin embargo, la aparición de Héroes con habilidades lo cambia todo, añadiendo un punto más al equipo que servirá para terminar con las 50 rondas que nos llevarán a la victoria. Y sí, habrá nuevos y enormes jefes finales, que os retamos a descubrirlos por vosotros mismos.
Pero lo realmente novedoso es el ya mencionado modo Escape. Aparte de presentar 3 nuevos personajes: Keegan, Lahni y Mac, pone sobre la mesa un elaborado modo que por momentos parece todo un survival que combina lo mejor de Gears con clásicos como Resident Evil. En Escape nos infiltraremos en una Colmena para eliminarla desde dentro soltando un veneno que se irá extendiendo poco a poco hasta el final del mapa. Solo tendremos 60 segundos desde que activamos el veneno para que empiece a expandirse y es cuando se abre la veda a una carrera hacia la salida frenética en la que la exploración, la gestión de los armas con poquísima munición disponible y nuestra habilidad serán esenciales para escapar ya que el veneno nos matará tanto a nosotros como a los enemigos.
Con varios niveles de dificultad disponibles, Escape permite en sus máximos niveles obtener recompensas exclusivas, pero siendo sólo para 3 jugadores, necesita una coordinación extraordinaria entre los jugadores, por lo que creemos que seguro que más de uno perfeccionará su estilo hasta llegar a dominar los 4 mapas que hay de inicio. De hecho, se nota que el editor del modo Escape servirá para dar incluso más variedad, porque nos hemos llegado a perder en más de una ocasión, en los laberínticos pasillos de la Colmena. Mucho más divertido de lo que esperábamos.
Tanto para Escape como para Horda, habrá unos personajes comunes (Halo Reach y Sarah Connor de inicio), pero todos llevarán un sistema de tarjetas que proporcionan habilidades. Por supuesto, aquí toca parte de la dinámica de los micropagos con la moneda Premium, el Hierro, del que aún no hemos podido obtener la conversión en dinero real, pero por defecto, esas habilidades las podremos mejorar gratuitamente ganando cartas con los Envíos de suministros -también gratuitos-, que nos permitirán ganar recompensas únicas y cartas para añadirlas solo por jugar y están diseñados para beneficiar precisamente al personaje con el que juguemos.
Como último detalle del multi, nos gustaría destacar una curiosa novedad que nos ha encantado, el sistema de Aliados. Algo tan fácil como jugar con tus amigos, te supondrá un reconocimiento, es decir, cada uno de tus amigos tendrá un nivel respecto a tí. Conforme más suba ese nivel, mejores recompensas para ambos, así de fácil. Tu equipo de Horda ahora agradecerá más que nunca que seas fiel a ellos. Además, parece que The Coalition pretende que las apariciones estelares en el multi sean continuas: Halo Reach, Sarah Connor, el T-800 de Terminator y el recién confirmado Dave Bautista.
Conclusión
Tras meses de espera, Gears 5 está aquí. Y no solamente será el más grande y ambicioso de la historia. Será el más jugado de todos sin ninguna duda. Lanzamiento en Xbox One, para Windows 10, Steam, y por supuesto en el servicio donde pasará a ser el rey absoluto: Xbox Game Pass. Gears 5 será el abanderado de un servicio que por sólo un puñado de euros permitirá disfrutar de uno de los mejores juegos de esta generación. Gears 5 + Xbox Game Pass es un combinación explosiva.
El trabajo de The Coalition roza lo perfecto en todas las áreas discutibles. Gráfica y artísticamente es espectacular, jugablemente está más pulido que nunca y en consola los 60 fps terminan de darle el toque de sal para que todo esté en su punto. Está claro que Gears 5 se ha visto influenciado por todas las tendencias actuales, con una mejora en su narrativa en la que los protagonistas, con pocos segundos en pantalla, ya derrochan personalidad e incluso sabes como se sienten. Aunque a Kait Díaz quizá le falte un poco de carisma que termine de igualarla a un grande como Marcus Fénix, no tenemos duda de que su protagonismo es acertado y su condición pone un nuevo punto y aparte en la saga.
Las partes de exploración libre con el Esquife o la inclusión de Jack de manera activa le sientan de maravilla y nos sentimos satisfechos de ver como no han alargado artificialmente el título, porque nunca deja de sentirse como el mismo Gears de siempre. La apuesta firme por un cooperativo tanto en sus modos multijugador como en la campaña incluso con la pantalla partida no hacen otra cosa más que sumar.
Quizá precisamente el ser un Gears le perjudique de cara a quién busque otro tipo de título. Pero lo sentimos por ellos: aquí hay sangre, guerras, acción, secuencias increíbles, y mucho, mucho estilo. Y además lo podemos decir tranquilamente, posiblemente no sea el GOTY de este año, pero sus valores de producción y lo absolutamente completo que es, lo colocan a un nivel en el que el calificativo AAA se le queda pequeño. Gears 5 es uno de los mejores títulos de acción que han pasado por nuestras manos y un absoluto imprescindible de Xbox One.