Os traemos nuestro análisis de la propuesta plataformera de Graffiti Games y Serenity Forge, The King's Bird, un título que nos pondrá a prueba.
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Hablar de juegos de plataformas es hablar de un género que ha estado ligado a la consolas desde tiempo inmemoriales. Es un género que nunca pasa de modo y siempre tenemos varios títulos basados en él. Más desde el auge de los juegos indies, que saben exprimir y sacar todo el potencial a este tipo de juegos. Y en esa línea está la última obra de Serenity Forge, The King’s Bird.
La compañía nos ofrece un autentico plataformas, desafiante hasta el último suspiro, con una trama que queda en un segundo plano para darle todo el protagonismo a la jugabilidad. Una jugabilidad ya clásica, con todo tipos de saltos. Sin embargo, The King’s Bird es un juego sobre la libertad y sobre volar libres.
Es un título que maneja una dinámica y una jugabilidad que ya hemos vivido, pero que sabe labrarse su propia identidad. Por que al fin y al cabo, ¿quién no ha soñado alguna vez con volar?
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Apartado técnico
The King’s Bird es un juego que destaca por lo visual. Es cierto que no tiene un apartado gráfico de gran calidad y modelados, pero su juego con las sombras, la profundidad y la ambientación es perfecta. No en vano, los diferentes niveles cuentan con inspiraciones en la cultura Maya, Romana e India. Así, nos encontraremos con estructuras minimalista, diferentes pinturas murales basadas en elementos de esas culturas… Todo cuidado al detalle.
Pero no sólo destaca por estos elementos. La paleta de colores elegida por Serenity Forge es impresionante y combina muy bien en cada escenarios. Contrastes ricos, detalles vistosos, efectos lumínicos,… todo esta perfectamente sincronizado e integrado.
Incluso la música. Una BSO que sinceramente es impresionante y encaja a a la perfección en cada nivel. Eso sí, algún que otro tema termina haciéndose repetitivo y puede llegar a cansar a alguno, pero en líneas generales es de 10. Muchas de estos cortes sonoros nos recuerdan o hacen que recordemos temas de otros juegos.
Por último, destacar que técnicamente el juego cumple. Nosotros lo hemos jugado en una Xbox One S y no nos hemos encontrado con ningún problema ni Bug. Por supuesto, el juego se mantiene estable y no hay ninguna caída de fps o tirones que entorpezcan la jugabilidad.
Jugabilidad
Como ya hemos comentado, The King’s Bird es un juego de plataformas. Pero es un juego exigente. Un juego que no nos pondrá las cosas fáciles. La dificultad de los diferentes niveles irá aumentando según vayamos avanzando, consiguiendo mezclar a la perfección la dificultad, la frustración de no poder avanzar y la satisfacción de conseguirlo.
Por que sí, en este titulo nos vamos a caer mucho, vamos a fallar muchos saltos fáciles y nos van a dar ganas de tirar el mando. Pero el gran logro de The King’s Bird es que sabe como picarnos en el buen sentido. Sabe como hacer que no estrellemos el mando contra el suelo y lo intentemos una y otra vez hasta lograr pasar el nivel. La razón es sencilla: tiene los tintes de los juegos de antes, de esos plataformas que nos tenían enganchados tardes enteras jugando cuando éramos pequeños.
Sin embargo, el gran pero y mancha negra del juego es que los controles muchas veces no son todo lo precisos que deberían. Más de una vez nos hemos encontrado totalmente vendidos por que el salto no ha salido cuando hemos querido o directamente no ha reconocido la pulsación. Estos problemas son el lastre del juego, algo que enturbian la jugabilidad. Eso sí, hay que mencionar que no ocurren muy a menudo y sólo de vez en cuando.
Hablando de la jugabilidad, está es muy sencilla. Con la combinación de unos cuantos botones podremos realizar diferentes tipos de saltos y planear, la verdadera innovación del juego. Por que en cuanto a saltos, tenemos los típicos de cada jugo (normal, largo, rebotando en la pared,…) Pero en The King’s Bird podremos volar y planear, aprovechando la velocidad de nuestro personaje y sus saltos podremos realizar pequeños vuelos para llegar a sitios que, de otra manera, sería imposible. Eso sí, el vuelo y planeo no es eterno, sólo lo podremos hacer brevemente, hasta que toquemos tierra de nuevo o se agote el tiempo de nuestras alas. Después, tendremos que volver a saltar y planear de nuevo. Por que siempre hay que mantener los pies en el suelo.
Faroles, Faroles Everywhere.
Todas estas mecánicas (y nuestra pericia) la pondremos a prueba en un total de cinco niveles. Cada uno de ellos está subdividido en varios subniveles, todos ellos diferentes entre sí. Además, cada uno de ellos los podremos superar de diferentes maneras: recorriendo paredes, volando o lanzarnos al vacío para aprovechar la velocidad de la caída y planear más lejos.
Pero claro, aquí entra en acción los Faroles. Estos son los checkpoint del juego, Cada vez que pasemos por uno se activarán y cuando nos caigamos reapareceremos en el último. Para nuestra suerte, hay muchos en cada nivel, prácticamente uno después de cada zona más o menos complicada. Esto permite que la frustración al menos no sea tanta, ya que no tendremos que reiniciar el nivel completo cuando ya alcanzábamos a ver el final del camino.
Por último, en cada uno de estos sub-niveles tendremos que ir reuniendo unos pajarillos repartidos vilmente por el escenario. Y decimos vilmente por que algunos están colados en posición y sitios de muy difícil acceso, lo que nos costará varios re-inicios y estrujarnos la cabeza para conseguirlos. Por que la recolección de todos ellos tiene premio, no sólo en forma de logros, si no por que nos permiten desbloquear nuevas zonas.
Duración
The King’s Bird es un título difícil de valorar en cuanto a duración, por que depende mucho de la habilidad de cada uno. Es un juego muy desafiante y complicado, pero si eres alguien habituado a este tipo de género, en cuanto te hagas con los controles podrás avanzar más rápido que alguien recién llegado al género. De este modo, el juego puede durarnos entre 5 y 10 horas.
Una estimación que podemos aumentar si nos dedicamos a conseguir todos los pajarillos repartidos en cada sub-nivel, batir nuestro propio récord de tiempo de cada uno de ellos o sacar cada logro. De este modo, The King’s Bird si que nos invita a re-jugarlo para auto-superarnos cada vez.
En cuanto trama, esta queda en un segundo plano. Aunque importante, Serenity Forge se ha centrado totalmente en darle todo el foco a la jugabilidad. De la historia podemos destacar que no hay ni una sola línea de dialogo ni nos encontraremos con una línea de texto. Todo se expresará mediante las acciones de los personajes y sus “conversaciones” a modo de melodía. Una oda total a la música que funciona bien y que encaja con la estética general del juego.
En cuanto a la trama, podemos decir que va sobre la búsqueda de la libertad de cada uno. Si realmente somos libres o nos creemos libres, si podemos volar cómo queremos. O, en cambio, si todo es a medias y sólo nos sentimos libres o volando durante un tiempo. Una historia con la que cada uno conectaremos de manera diferente.
Conclusión
Serenity Forge nos presenta un título muy especial e intimo. Uno donde cada uno encontraremos o destacaremos diferentes matices. Por que todos alguna vez hemos querido volar libres, salir corriendo y explorar. Y eso es lo que nos ofrece The King’s Bird, un título plataformas que nos pondrá las cosas difíciles.
Gráficamente el juego es precioso y combina a la perfección las diferentes estéticas con una música bien trabajada. Una BSO que tiene una mayor importancia de lo que parece a primera vista, ya que será la fuente de información de una historia que no cuenta con diálogos ni líneas de texto, pero que entenderemos a la perfección.
Además, The King’s Bird cuenta con una jugabilidad bien lograda, con una amplia gama de movimientos, incluyendo vuelos y planeos. El pero lo encontramos en que a veces no son todo lo precisos que deberían ser en un juego de este estilo.
En definitiva, el título de Serenity Forge es un buen juego de plataformas. Desafiante, con una historia sobre la libertad y que incluye novedades como el vuelo en su jugabilidad. Si sumamos su precio de salida, 19,99€, tenemos un juego que enamorará a los amantes del género.
*Gracias a Serenity Forge por el material proporcionado para poder realizar este análisis.
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Apartado técnico83/100
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Jugabilidad80/100
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Duración78/100
Lo bueno
- Un gran apartado visual.
- Buen diseño de niveles.
- Dificultad bien implementado y con una buena cuerva de nivel.
Lo malo
- Los controles a veces no son todo lo precisos que deberían.