Hacemos un repaso a los golpes que está encajando Microsoft en estos 6 primeros meses del año por parte de los medios de información.
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Hoy es uno de esos días en los que me apetecía escribir con calma, después de haber meditado lo acontecido estas semanas con Microsoft y su manera de proceder. Los americanos nos tienen muy mal acostumbrados todos los primeros semestres de año y es algo que se repite hasta la saciedad. En general no hay noticias que genere por si sola Microsoft y que sean capaces de hacer movimiento en servicios que facturan por impresiones.
Hemos visto como su única arma “potente” en lo que va de marzo ha sido un servicio que aún está en pruebas. Esta pequeña reflexión os va a servir de introducción para lo que realmente quería comentaros y es que en general estamos viviendo un panorama que es un auténtico vertedero de información contra lo que anuncia Microsoft o su pasividad en general.
Y ojo, no soy yo uno de esos conspiranóicos con sombrero de aluminio que afirman que detrás de todo esto hay una suerte de entidad malvada y judeomasónica contra los americanos. Gran parte de culpa tiene la propia Microsoft. Descartando la teoría de la conspiración por completo, todo este asunto se reduce a que los negocios hay que mantenerlos.
Si las buenas nuevas de Microsoft no tienen tirada, habrá que resaltar las malas.
Esa cita es lo que pensarán los más pragmáticos. Es cierto que Microsoft es la que da pie a todo esto, al menos el 60% de las veces ya que se está viendo incapaz de generar ruido a su favor. Una actualización de dashboard tras 700 que llevamos ya, no genera interés ni es atractivo para la comunidad. Que si, Beam está muy bien pero hace falta un revulsivo y un goteo de información constante.
Como decía, y espero que nadie entienda esto como ataque personal o laboral hacia otros servicios informativos, es que ahora mismo la gran mayoría de medios generalistas están tirando hacia otros caminos más dulces para los usuarios y quizá abusando un poco sobre noticias que van al cuello de Microsoft. Mientras tanto, en Redmond aún estarán celebrando las ventas de octubre del pasado año… Esto no es un invento mío, ni fantasmas en el aire, es cuantificable y lo que se puede cuantificar se convierte en hechos.
Es una cuestión de hechos y los hechos no tienen juicio moral. Simplemente establecen lo que hay. No lo que pensamos de ellos, no lo que sentimos. Simplemente son.
Matt Murdock
En Generación Xbox tenemos la suerte de no deber favores, y también la de no estar bajo el paraguas de nadie así que me voy a permitir el lujo de citar algunos nombres como el de Gamingbolt relegando en más de un articulo reciente a Xbox como una marca irrelevante para los jugadores. Tampoco me olvido de Digital Foundry, que ha descubierto que los 900p de Xbox ya no tienen tirada y las comparativas las hacen ahora entre PS4 y Switch. Y así un largo etcétera. En España la feria es la de siempre.
En general y como ocurre con todos los servicios de información, existe una casta de periodistas que se lamen las heridas los unos a los otros, y por más que se quiera mirar hacia otro lado esto es una realidad que pone de manifiesto que imperan los gustos personales o el negocio. La gente lo nota, lo percibe y quizá también sean parte del problema al consentirlo. Hace unos días leíamos titulares que rezaban algo así como: “Phil Spencer asegura que los first party de Microsoft están en estado crítico”. Y bueno, la realidad era otra bien distinta.
Quizá estaréis diciendo que esto es normal y que lleva pasando ya mucho tiempo. Y es verdad. Pero este primer semestre, en donde Microsoft lo está haciendo rematadamente mal, la cosa se ha acentuado. Habrá quien piense que esto solo es una pataleta de fan y no le culpo por ello, pero también pienso que somos un buen altavoz y que nuestra responsabilidad como medio es hacernos eco de lo acontecido, no tenemos porque ser correctos, no tenemos porque ser amables y nuestro mensaje ha de ir alineado con lo que piensan nuestros lectores.
Así que os invito a todos, promotores y detractores de la marca a debatir conmigo sobe este asunto.