Manual Samuel parece un simulador de persona normal, pero en realidad esconde una historia de humor negro bastante más divertida e interesante de lo que parece.

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Con tantos gráficos, nueva tecnología, multijugadores cooperativos, complejidad de puzles, etc.. realmente se agradece a veces probar uno de los cientos de indies que llenan el catálogo de la consola, muchos de ellos siempre intentan aspirar a solo ofrecer entrenimiento videojueguil en las formas más básicas. Si a esto le sumas un humor también simple y absurdo, tenemos el resultado del juego que nos ocupa y la verdad, es que nos ha encantado.

Ya habíamos visto en uno de los recopilatorios de ID@Xbox del último E3 un pequeño flash de este Manual Samuel, del que un servidor se quedó enamorado. No os preguntéis porque motivo me interesaba antes de leer de que va el juego.

Lo primero de todo es el argumento, para ponernos en situación, nosotros somos Samuel, uno de esos pijos super-ricos que parecen tener la vida solucionada con la pasta que le da su padre por no hacer nada. Precisamente por su prepotencia y mala actitud hacia la vida, Samuel muere trágicamente lo que evidentemente provoca que vaya al infierno de cabeza. Por suerte o por desgracia para él, allí le espera La Muerte, uno de los 4 jinetes del Apocalipsis, que parece bastante aburrido.

La jugabilidad se reduce a controlar el desparrame de Samuel, que no puede ni pestañear solo. - ¡Comparte!

La Muerte, en una cómica versión skater de la misma, de buen rollito le propone a Samuel una 2ª oportunidad. Si consigue sobrevivir todo un día en modo «manual», podría volver a la vida. De esta manera, cualquier acción que realizará Samuel en su anterior estancia en la tierra ahora no podrá hacerla automáticamente.
Apartado técnico
Para hacernos una rápida idea, la estética del juego es como la de una película de animación en 2D solo que hecha con Flash. ¿Recordáis aquellos minijuegos flash que había en multitud de web? Manual Samuel parece sacado directamente de una de ellas. A pesar de tener un diseño artístico gracioso y resultón, este efecto le da un punto negativo con su estética pasada de moda.

Por suerte, el conjunto está bien empacado, con un narrador que constantemente va hablando con el jugador al límite de la 4ª pared, siempre parece tener la frase adecuada para situar al pobre Samuel en la escena, y hacer de su simple gameplay una coreografía premeditada, manteniendo el hilo argumental en una constante, que por suerte está bien traducido al español.

Al final, todo el diseño parece buscar ese punto humorístico, que en este caso es casi humor negro, muy parecido al que podamos disfrutar de los guiones de Seth Rogen y Evan Goldberg, aún con muchísimas salvedades. Pero bueno, si por ejemplo os gustó Juerga hasta el fin, Malditos Vecinos, The Interview o la más reciente La fiesta de las salchichas, sabréis a que me refiero y os recomiendo encarecidamente que le echéis el guante a Manual Samuel.
Jugabilidad
Esta simpleza que llevamos predicando durante la review también se refleja en la jugabilidad, pero con salvedades. Es cierto que la operativa de manejo de Samuel es simple, pero el hecho de combinarlo todo puede dar a situaciones ciertamente complejas de resolver. No quisiéramos desvelar las mecánicas que iremos descubriendo durante el juego, pero básicamente tendremos un botón para inspirar, otro para expirar, otro para pestañear, mover la pierna izquierda, la pierna derecha, la mano izquierda, la mano derecha, otro para girar, otro para enderezarte, y para la acciones con la boca otro botón más.

Si te gustan las pelis de Seth Rogen, no dudes en probar Manual Samuel - ¡Comparte!

En principio todo bien, ¿no? Imagina ahora el mero hecho de caminar hacia una puerta: de respirar no te puedes olvidar nunca, si no pestañeas, se te nubla la vista, si intentas mover la pierna que tienes delante en vez de la de detrás te desparramas por el suelo…un auténtico despropósito. Y todo eso mientras mantienes tu espina dorsal recta. Nos da la risa nada más imaginarlo de nuevo…

Todo el juego se trata de eso. Samuel intenta sobrevivir como puede al peor día de su vida, que comienza con las acciones más cotidianas del día a día para terminar…bueno…digamos que haciendo cosas mucho más importantes. La escena en la que cogemos el coche es de lo mejorcito que se les ocurrió a los desarrolladores, además, la compañía de La Muerte cuya máxima preocupación de su existencia es hacer un kickflip con su skate, es todo un acierto.
Duración
Y aquí viene lo malo de todo esto. Es muy corto, de unas 2 horas de duración, aunque te podría durar menos si eres lo suficientemente hábil. Pero lo que nos sienta peor de todo es que realmente nos hubiera gustado seguir algún rato más la historia del pobre Samuel, nos hemos quedado con muchas ganas de ver otro tipo de situaciones mucho más rocambolescas de las que tenga que escabullirse el protagonista.

Para los que vean un reto real en el juego, tenemos el modo cooperativo para controlar entre dos jugadores a Samuel, bastante divertido, y un modo contrarreloj que pondrá nuestras habilidades a prueba, ya que para llegar si quiera al tiempo bronce, tendremos que tener un gran dominio del personaje y cualquier cagada nos fastidiará el resultado.

Conclusiones

En definitiva, Manual Samuel es un título que podemos recomendar tranquilamente, advirtiendo solo de su corta duración. El juego es divertido, te hace pasar un buen rato, es algo diferente, con una premisa bastante loca, y fácil de llevar. Es el típico juego ideal para divertirte con unos amigos, unas pizzas y unas cervezas. Las risas están aseguradas.

Perfectly Paranormal, el estudio creador junto a Curve Digital como editora pueden estar orgullosos de haber sacado uno de los juegos que más me han hecho reir en 2016, aunque quedarnos con ganas de más aventuras de Samuel, es peor que otra cosa. Además su bajísimo precio seguro que hace que no te lo pienses mucho. Por 9,99€ podrás hacerte con él.

Pros	Contras
* El control de Samuel es la risa	* A veces parece un juego Flash
* El modo cooperativo	* Corto no, lo siguiente
* El narrador y la historia que envuelve todo en lo que parece ser un comic